MITOLOGIA NORDICA
Ginnungagap existió antes que el cielo o la
tierra. La región norte de Ginnungagap se llenó de hielo y esta dura tierra se
conocía como Niflheim.
Opuesto
al Niflheim estaba la región más meridional conocida como Muspelheim, con brillantes chispas y ardientes brasas.
Ymir fue concebido en el Ginnungagap
cuando el hielo del Niflheim se encontró con el calor del Muspelheim y se
derritió. Con gotas de eitr (sustancia que da origen a
todas las cosas vivas) se formó el gigante de la escarcha entre los dos mundos,
y las chispas de Muspelheim le dieron vida
Mientras
Ymir dormía, comenzó a sudar y así concibió la raza de los gigantes. Bajo su axila
izquierda crecieron un hombre y una mujer, y sus piernas crearon a su hijo de
seis cabezas, Þrúðgelmir.
Ymir
se alimentó de los cuatro ríos de leche de la vaca primigenia Auðumbla la cual se alimentaba lamiendo
bloques de hielo salados.
Auðumbla
(también Auðhumla, Auðhumbla) según se relata fue creada en el inicio del tiempo a
partir del hielo derretido del Niflheim en el Ginnungagap, de la misma manera
que Ymir. Se alimentaba del hielo del Niflheim, lamiendo pedazos de sal y
escarcha, mientras el hielo se derretía al contacto con el aire caliente del Muspelheim.
La
vaca lamió los bloques de hielo, que eran salados; y el primer día que ella
lamió los bloques, surgió de los bloques en la noche un cabello de un hombre;
el segundo día, una cabeza de un hombre; el tercer día todo el hombre estaba
allí. Él se llama Buri tenía
facciones delicadas, grande y poderoso.
Buri engendró un hijo llamado Borr, quien se casó con la mujer
llamada Bestla, hija de Bölthorn el gigante; y tuvieron tres
hijos: uno fue Odín, el segundo Vili, el tercero Ve.
Los hijos de Bor mataron a Ymir, y cuando cayó, la sangre derramada por sus heridas ahogó la raza de los gigantes de la escarcha. Solo dos gigantes sobrevivieron a la inundación provocada por la sangre de Ymir, estos fueron el nieto de Ymir, Bergelmir (hijo de Þrúðgelmir) y su esposa. Ambos fundaron una nueva raza de gigantes de la escarcha.
Odín
y sus hermanos usaron el cuerpo de Ymir para crear Midgard en el centro de Ginnungagap.
Con
su carne se hizo la tierra. Con su sangre se formaron los mares y los lagos.
Con sus huesos se erigieron las montañas. Con sus dientes y fragmentos de
huesos se hicieron las piedras. De su pelo crecieron árboles y los gusanos de su
carne formaron la raza de los enanos. Como todos ellos han sido
creados, no pueden procrear. Cuando muere un enano, princesas enanas, creadas
para este fin modelan un nuevo enano con piedras y tierra.
Los
dioses pusieron su cráneo sobre el Ginnungagap y crearon el cielo sostenido por
cuatro enanos llamados Norðri, Suðri, Austri y Vestri. A estos
enanos les fueron dados los nombres de Este, Oeste, Norte y Sur. Odín luego
creó los vientos colocando a uno de los hijos de Bergelmir bajo la forma de un
águila, al final de la tierra. Luego arrojó el cerebro de Ymir al viento y este
se convirtió en las nubes.
Sin
embargo, aún este nuevo territorio estaba oscuro, así que los dioses decidieron
ir a Muspelheim para robar las centellas de la espada de Surtr. Con las dos más grandes crearon el Sol y la Luna y con el
resto las estrellas. El Sol y la Luna fueron colocadas sobre dos carros que
girarían sin parar sobre Midgard, turnándose en el firmamento para crear el día
y la noche. Para mantener vivo el giro perpetuo de las carrozas hicieron que
los lobos Sköll y Hati las persiguieran, tratando de
alcanzarlas sin conseguirlo, salvo en ocasiones excepcionales, cuando se
producen los eclipses. Los dos lobos simbolizaban la "repulsión" y el
"odio" respectivamente. La carroza del Sol era tirada por el blanco
corcel Skin, que con su trotar
producía la brillante luz del día, mientras que el otro carruaje era tirado por
Hrim, caballo negro que a su paso
producía el rocío y las escarcha.
Una
vez que los dioses contemplaron su obra, tan solo añadieron las estaciones de
invierno y verano y pensaron que estaba lista para recibir a los primeros
humanos.
En cierta ocasión en que Odín y sus hermanos caminaban por la playa divisaron dos troncos de árbol, un fresno y un aliso, arrrastrados por las olas, estos procedían del cabello de Ymir que había llegado a formar grandes bosques. Del fresno crearon un hombre al que se le dio el nombre de Ask (de Ash, ceniza) y del aliso crearon una bella mujer a la que se le llamó Embla (parra), éstos tuvieron la vida de un árbol hasta que los dioses les dieron mente, voluntad y deseo. Odín les infundió la vida. El dios Hoenir les dotó de alma y capacidad de juicio. Lodur les dio calor y belleza. De ellos descendería toda la raza humana, cuya morada es Midgard.
Del suelo brotó Yggdrasilll, el gran fresno, cuyas poderosas ramas separaban los cielos de la tierra y cuyo tronco constituía el eje del universo. De hecho en algunas leyendas Yggdrasill es el mundo mismo. Nadie podría narrar su grandeza. Sus raíces se hincan en las profundidades, más allá de las raíces de las montañas y sus perennes hojas atrapan las estrellas fugaces según pasan.
El
árbol se divide en tres partes principales: Niflheim (raíz), Midgard (tronco) y
Asgard (copa). Se puede notar en
esto la representación del ciclo de nacimiento, vida y muerte.
Son
tres sus raíces. La primera llega hasta Nifheim, la tierra de las sombras o
infierno y toca la fuente Hvergelmir.
Hvergelmir es una fuente de aguas heladas en Niflheim. Todos
los ríos helados vienen de allí, y es la fuente de los once ríos, Élivágar.
La
segunda entra en la tierra de los gigantes helados y bebe de la fuente de Mimir, fuente de toda sabiduría.
Mímir o Mim es un gigante mitológico. Tío
materno de Odín guardían de las fuentes de la sabiduría, ubicadas en las raíces
de Yggdrasil.
Es uno de los dioses
fundamentales, reconocido por su conocimiento y sabiduría. Odín viajó a la
tierra de los gigantes (Jötunheim), para adquirir la sabiduría y el
conocimiento omnisciente de Mímir.
El conocimiento fue obtenido al beber del pozo
mágico de Mímir, pero como precio por beber de él, Odín fue forzado a sacarse
uno de sus ojos. Luego de lo cual, volvió a Asgard con la cabeza de Mímir para
consultas oraculares de acuerdo a algunas historias. Mímir fue también el
consejero de Hœnir después de que se convirtiera en el soberano de los Vanir.
La tercera se extiende por lo cielos donde discurre la fuente de Urd, la más sabia de las nornas.
Las nornas (Urð, Verdandi y Skuld) viven
bajo las raíces del fresno Yggdrasil, el árbol del mundo en el centro del
cosmos, donde tejen los tapices de los destinos y riegan el fresno con las
aguas y la arcilla provenientes del pozo de Urd para que éste no pierda su
verdor ni se pudra. La vida de cada persona es un hilo en su telar, y la
longitud de cada cuerda es la duración de la vida de dicha persona.
De esta manera, todo está pre-ordenado:
incluso los dioses tienen sus propios tapices, aunque las nornas no se los
dejan ver. Este claro sometimiento de los dioses a un poder fuera de su control
y la implicación de que ellos, también, tendrán un final algún día, son temas
trascendentes en la literatura que rodea la mitología nórdica.
A los pies del árbol se encontraba el dios Heimdall que era el encargado de protegerlo de los ataques del dragón Níðhöggr y de una multitud de gusanos que trataban de corroer sus raíces y derrocar a los dioses a los que este representaba.
Heimdall es el dios guardián en la mitología nórdica. Es hijo
de Odín y de nueve mujeres gigantes que lo nutrieron con sangre de jabalí.
Poseía una vista aguda, un fino oído y podía estar sin dormir varios días. Su
percepción era tan extraordinaria que oía crecer la hierba, razón por la cual
se le designó guardián de la morada de los dioses, Asgard, y del Bifrost, el
arco iris que hace de puente hasta ella.
Según la mitología nórdica, con un cuerno llamado
Gjallarhorn, que le regaló Odín, anunciará el combate entre dioses y gigantes,
después del cual sobrevendrá el fin del mundo, el Ragnarök. Heimdal intervendrá
en la lucha, en la que morirá a manos del dios Loki. Aunque será símbolo del
Poder porque será el último dios en caer en el Ragnarok. Una tradición nórdica
dice que descendió a la tierra y engendró en tres mujeres los tres linajes
(castas): príncipes, súbditos y siervos.
Mientras éste vive en las raíces de
Yggdrasil, Ratatösk corre de arriba para abajo llevando los cotilleos entre el
águila sin nombre y el halcón Veðrfölnir, ambos en la cima de Yggdrasil, hacia
Nidhogg, esperando causar trifulcas entre ellos.
Yggdrasil
rezuma miel y cobija a un águila sin nombre en la cima, que entre sus ojos
tiene un halcón que se llama Veðrfölnir.
Cuatro
ciervos, Dáinn, Dvalinn, Duneyrr y Duraþrór, espíritus de cuatro enanos
con el mismo nombre que adoptan esa forma para llegar a las ramas más altas, mordisquean
los nuevos brotes del fresno antes de que reverdezcan.
El
corcel de Odín, Sleipnir, pace en su
follaje. La cabra Heidrun se
alimenta de sus hojas.
Ratatosk es la ardilla que de allí correrá del
árbol de las cenizas Yggdrasil; desde arriba lleva las palabras del águila, y
las recita a Nithhogg abajo.
Solamente
el amor de los Nornos lo mantiene en buen estado. Día a día cogen agua de la
fuente de Urd y la vierten en Yggdrasill para mantenerlo floreciente.
Nueve
mundos posee Yggdrasil: Helheim, Svartalfaheim, Niflheim, Jotunheim, Midgard, Vanaheim, Alfheim, Asgard, y Muspelheim; y por ellos pasó Odín antes de
obtener el secreto de las runas. Para los nórdicos, el mundo del hombre era
nada más una rama del gran Yggdrasil, el fresno del mundo.
1 – Helheim
Helheim
o Hel, es conocido como el reino de la muerte y se encuentra en la parte más
profunda, oscura y lúgubre de Niflheim, uno de los nueve mundos del Yggdrasil,
en la mitología nórdica.
Estaba
gobernado por Hela, monstruosa hija
de Loki. El camino que lleva hasta ella es Helway,
que es tan largo que Hermod lo tuvo
que recorrer en nueve días y nueve noches, siempre hacia el norte y
descendiendo constantemente.
La diosa o gigante Hela o Hel
era la encargada en Hel. Hija del dios Loki y de la gigante hechicera
proveniente del Jötunheim, Angrboda, Hela reina sobre el Helheim, donde vive
bajo una de las raíces de Yggdrasil.
La mitad superior de su
cuerpo era realmente hermosa, pero la mitad inferior de este era igual al de un
cadáver en putrefacción y de él despedía un olor nauseabundo. Se cree que Hela
se representa así por cómo es vista la muerte por los hombres.
El
Helheim está rodeado de una muralla en la que se abren una o varias puertas y
en su imperio corren ríos sombríos. Una de esas corrientes de agua se llama
Slid. Ésta nace en el este, fluye hacia el oeste a través de valles infectados
de veneno y está llena de barro y espadas. Un perro, Garm,
vigila la entrada de una de sus cavernas, Gnipapellir.
En
este mundo terminaban los que habían muerto por enfermedad o vejez, y una vez
se entraba en él ni siquiera los dioses podían salir, a causa del interminable,
inagotable e intransitable río Gjöll,
que lo rodeaba.
Por
supuesto todos los criminales irán al Helheim, pero para estos hay unas áreas especiales
dentro del Helheim.
El
Nastrand (playa de cadáveres)
también conocido como Naströnd y Nastrandir, donde Níðhöggr absorbe los fluidos
de los cuerpos de los condenados. Es una sala dentro del reino de Hel donde
irán las almas de las personas viles, los asesinos, los perjuros y los
mentirosos notorios.
También
en Nastrand como en el resto del Helheim el sol nunca brilla y los puertos de
la sala se abren todos hacia el norte. Las paredes están cubiertas con
serpientes que miran todas hacia adentro, escupen sin parar veneno así que esto
fluye en torrenciales por la sala y llena todo con vapores venenosos. El
Nastrand tiene similitud con el infierno, según las creencias cristianas.
2 – Svartálfaheim
Uno
de los nueve mundos de que se componía el cosmos. Otro de los nombres que
posiblemente adopta éste es Niðavellir, en otros manuscritos.
En
él habitaban los elfos oscuros y muy posiblemente, los enanos nórdicos.
Los
elfos oscuros, Dökkálfar o Svartálfar, (elfos oscuros y elfos
negros respectivamente, refiriéndose al color de cabello y no a la piel) son
unas criaturas que residen en el reino de Svartálfaheim con características
similares a los enanos y son la
contraparte de los elfos de la luz, los Ljósálfar.
El
Svartalfar original trabajó las fraguas en el nivel más bajo del árbol del
mundo. Su papel y aspecto varía a través de folclore germánico pero se
mencionan a veces con la piel negra u oscura como resultado del trabajo en la
forja.
Los
Dökkálfar son guardianes ancestrales que protegen a la gente, si bien pueden
también ser amenazadores, especialmente cuando se les trata groseramente.
Normalmente intentan evitar la luz, aunque no sean necesariamente subterráneos.
Los
enanos o duergar (en nórdico antiguo
dvergar, singular dvergr) son asociados con las piedras, lo subterráneo, la
muerte, la suerte, la magia y la tecnología, especialmente la forja.
Aunque
etimológicamente Dvergar hace referencia a "enanos", el concepto
nórdico de Dvergar a menudo se diferencia del concepto de "enanos" en
otras culturas. Por ejemplo, los enanos nórdicos son originalmente de tamaño
humano. No son descritos como los pequeños hasta el siglo XIII, cuando
comenzaron a aparecer en las sagas legendarias, a menudo como un elemento
humorístico. La verdad es
que estas criaturas de la tradición escandinava eran concebidas como capaces de
cambiar la forma y el tamaño de su cuerpo a voluntad.
3 – Niflheim
Niflheim
(también escrito 'Niflheimr' o 'Nifelheim', «Hogar de la niebla»), es el reino
de la oscuridad y de las tinieblas, envuelto por una niebla perpetua que existió
desde el origen.
En
él habita el dragón Níðhöggr que roe sin cesar las raíces del fresno perenne
Yggdrasil. Después del Ragnarök el dragón se dedicará a atormentar las almas
que queden en el mundo.
4 – Jötunheim
Jotunheim
es el mundo de los gigantes de Roca y Hielo, llamados colectivamente jötnar (en singular jötunn). Los jotunn eran una raza
mitológica de gigantes con fuerza sobrehumana, descritos como la oposición a
los dioses, a pesar de que frecuentemente se mezclaban o incluso se casaban con
ellos, ambos Æsir y Vanir. Su fortaleza es conocida como Utgard. Desde allí amenazan a los humanos de Midgard y a los dioses
de Asgard, de los que están separados por el río Iving.
Gastropnir, hogar de Menglad, era
uno de los hogares de los gigantes, que constantemente estaban en guerra con
los dioses nórdicos.
Þrymheim, hogar de Þjazi, era gobernado por el rey Þrymr.
Þjazi era un gigante, padre
de Skaði. Su más notable fechoría fue el rapto de la diosa Iðunn, quien sería
rescatada por Loki.
Los gigantes representan las
fuerzas del caos primitivo y de la indomable, destructiva naturaleza. Su
derrota a manos de los dioses representa el triunfo de la cultura sobre la
naturaleza, aunque por el costo de la eterna vigilancia.
Como una colectividad, los
gigantes son atribuidos generalmente con una apareciencia espantosa - garras,
colmillos y características deformes, aparte de un tamaño horroroso. Algunos de
ellos pueden incluso tener varias cabezas o una forma totalmente no-humanoide;
como Jörmundgander y Fenrir, dos de los hijos de Loki, vistos como gigantes.
Con mal aspecto viene poca inteligencia; las Edda más de una vez asemejan su
temperamento al de un niño.
Aun cuando son nombrados y
descritos más detalladamente, a menudo se les da características opuestas.
Increíblemente viejos, llevan la sabiduría de otros tiempos. Muchas
de las esposas de los dioses son gigantes.
Glæsisvellir era el lugar dentro del Jotunheim donde vivía el gigante Gudmund, padre de Höfund.
Gudmund (Guðmundr) de acuerdo
a la saga Hervarar era un rey en Jötunheim en Finnmark, Noruega que reinaba
sobre una tierra llamada Glæsisvellir.
Se dijo de él y sus hombres
vivían varias veces el lapso de hombres normales, así que los paganos creían
que el "Acre Sin Muerte" (Glaesisvellir) se emplazaba su reino. Tras
su muerte, fue adorado como dios y se le ofecían sacrificios.
Höfund, era un caudillo
vikingo, rey de Glæsisvellir y heredero del trono del jotun Gudmund, que
gobernaba sobre ese territorio. Se casó con una guerrera skjaldmö llamada
Hervör y tuvieron dos hijos, Angantyr y Heidrek.
5 – Midgard
Miðgarð
es el mundo de los hombres creado por los dioses. Representa la tierra asentada
por los hombres, un "asentamiento/residencia en el centro del mundo
conocido", de allí el término común de "Tierra del Medio".
6 – Vanaheim
Vanaheim
o Vanaheimr es el hogar de los Vanir, uno de los dos clanes de dioses aparte de
los Æsir.
Son
dioses de la fertilidad, el mar y la prosperidad. Mientras que los Æsir fueron
dioses de la guerra, los Vanir eran ricos y dadores de riqueza, patrones de la
fecundidad, placer y paz, y con los Æsir, traían unidad. Tenían un profundo
conocimiento de las artes mágicas, por lo que eran capaces de predecir el
futuro. Se decía que fue Freyja
quien enseñó magia a los Æsir. También practicaban endogamia e incesto, ambas
cosas prohibidas entre los Æsir
Los
principales son Njörðr, el padre de
los dioses Vanir y dios del mar, Frey
el dios de la fertilidad y Freyja la diosa del amor y de la sexualidad. Estos
vivían junto a los Æsir en Asgard, después del intercambio de rehenes tras la
guerra que los enfrentó.
Njörðr es uno de los Vanir y
el dios de la tierra fértil y de la costa marina, así también como el de
náutica y la navegación. Es el esposo de Skaði y padre de Frey y Freyja.
Frey o Freyr era el dios de
la lluvia, del sol naciente y de la fertilidad. Señor de la vegetación. Su casa
en Asgard era Alfheim. Freyr poseía la Espada de la Victoria, pero la abandonó
por conquistar a una gigante virgen. Posee el jabalí de oro Gullinbursti,
regalo de los enanos, que tira de un carro tan deprisa como un caballo al
galope, y cuyo resplandor ilumina la noche; también el barco Skíðblaðnir, y un
caballo que ignora todos los obstáculos. Es el dios favorito de los elfos.
Frey sentado sobre el trono
de Odín, sobre los mundos, espíaba la giganta Gerd, de la cual se enamoró.
Entregó su caballo y su espada mágica a Skirmir (que sabía moverse y luchar
sola por los aires), a cambio de que fuera a buscar a Gerd y manifestarle el
amor que Frey sentía por ella. Skirmir lo hizo, y luego de amenazar a Gerd con
maldecirla, ella aceptó casarse con Frey. Debido a este incidente, Frey no
tendrá su espada cuando llegue el Ragnarök.
Freyja esla hermana de Freyr,
hija de Njörðr, descrita como la diosa del amor, la belleza y la fertilidad. La
gente la invocaba para obtener felicidad en el amor, asistir en los partos y
para tener buenas estaciones.
Freyja también era asociada
con la guerra, la muerte, la magia, la profecía y la riqueza. Las Eddas
mencionan que recibía a la mitad de los muertos en combate en su palacio
llamado Fólkvangr, mientras que Odín recibía la otra mitad en el Valhalla. El
origen del seid y su enseñanza a los Æsir se le atribuía a ella. Cuando se desplaza, conduce sus gatos y se sienta en
su carro
Para
terminar la guerra entre los dioses, ambos bandos acordaron intercambiar
rehénes. Sin embargo los Vanir fueron engañados; furiosos cortaron la cabeza de
uno de sus rehenes, Mímir, y la enviaron a los Æsir. Odín recibió la cabeza y
la colocó bajo el árbol de la vida, el Yggdrasil.
7 – Alfheim
En
la mitología Nórdica, Alfheim, Álfheimr, también Ljusalfheim es uno de los
nueve mundos y el hogar de los Elfos.
Las
sagas nórdicas identifican a dos tipos de elfos que habitan en Alfheim:
ljósálfar (o elfos luminosos) y svartálfar (o elfos oscuros que habitan en el
interior de las montañas).
Los
Elfos luminosos tienen relación directa con los oscuros. Son parientes de
sangre compartida, pero con diferentes objetivos.
Eran
más hermosos que cualquier otra persona. Originalmente
se trataba de una raza menor de la fertilidad y representados como hombres y
mujeres jóvenes, de gran belleza, que viven en bosques, cuevas o fuentes. Se
les consideraba como seres de larga vida o inmortales y con poderes de vida
8 – Asgard
Asgard
(del nórdico antiguo Ásgarðr, 'recinto de los Æsir') gobernado por Odín y su esposa Frigg y rodeado por una muralla incompleta, atribuida a un anónimo
hrimthurs. Dentro de Asgard, se encuentra el Valhalla.
Los
æsir son los principales dioses del panteón nórdico. Están emparentados con
Odín y habitan en el Asgard, siendo mencionados bajo el término genérico guðin,
«dios».
Odín (nórdico antiguo Óðinn o Wotan o Woden),
es considerado el dios principal de la mitología nórdica. En la poesía
escáldica se hace referencia a él con infinidad de kenningar y uno de los que
se utiliza para mencionarlo es Allföðr ("padre de todos"). Esposo de Frigg
y padre de muchos de los dioses tales como Thor, Balder, Vidar y Váli.
Su papel, al igual que el de muchos dioses
nórdicos, es complejo. Es el dios de la sabiduría, la guerra y la muerte. Pero
también es considerado, aunque en menor medida, el dios de la magia, la poesía,
la profecía, la victoria y la caza.
Odín reside en el Asgard, en el palacio de
Valaskjálf, que construyó para sí y donde se encuentra su trono, el Hliðskjálf,
desde donde podía observar lo que sucedía en cada uno de los nueve mundos.
Como dios de la guerra, se encargaba de enviar
a las valquirias a recoger a los guerreros heroicos muertos en batalla, los
einherjer, que se sientan a su lado en el Valhalla donde preside los banquetes.
En el final de los tiempos Odín guiará a los dioses y a los hombres contra las
fuerzas del caos en la batalla del fin del mundo, el Ragnarök. En esta batalla
el dios será muerto y devorado por el feroz lobo Fenrir, el cual será
inmediatamente muerto por Vidar, quien le desgarrará las fauces y colocará un
pie en la garganta.
Frigg es una de las diosas mayores en la
mitología nórdica y germánica, esposa de Odín, reina de los Æsir y diosa del
cielo. Es la diosa de la fertilidad, el amor, el manejo del hogar, el matrimonio,
la maternidad y las artes domésticas. Sus funciones primordiales en los relatos
de la mitología nórdica la mencionan como esposa y madre. Tiene el poder de la
profecía aunque nunca relata lo que sabe, y es la única que junto a Odín tiene
permitido sentarse en el trono Hliðskjálf y observar sobre los nueve mundos.
Frigg también participaría en la cacería salvaje, Asgardreid, junto a su
esposo. Los hijos de Frigg son Baldr, Höðr y sus hijastros son Hermóðr,
Heimdall, Tyr, Vidar y Váli. Thor es mencionado en algunas ocasiones como su
hermano o como su hijastro. Frigg es acompañada en ocasiones por Eir, la diosa
de las curaciones. Las ayudantes de la diosa son Hlín, Gná y Fulla.
Los
enemigos de los æsir son los jotun, con los cuales se encuentran en una guerra
constante; anteriormente habían luchado contra los vanir, con quienes luego se
reconciliaron e intercambiaron prisioneros.
Tras
la guerra con los Vanir, las murallas de Asgard se vieron destruidas, quedando
vulnerable al ataque de los gigantes. Para reconstruirlas, los Æsir contrataron
los servicios de un constructor que acordó reparar las murallas en un tiempo
muy corto, y los dioses aceptaron, influidos por Loki, que si esto era así, le
cederían en pago por su trabajo, al Sol, la Luna, y a la diosa Freyja, en fe de
que el constructor no lo lograría. Ahora bien, el arquitecto poseía un caballo
maravilloso capaz de transportar en un instante masas increíbles de roca
llamado Svadilfari; tanto y tan bien
actuó que, pocos días antes del plazo fijado, el palacio se aproximaba a su
perfección. Los dioses, sintieron miedo de que lograra su meta, y se les
ocurrió crear una yegua maravillosa (que era, de hecho, Loki disfrazado), a la
que pusieron en el camino del caballo. Éste abandonó su trabajo para
perseguirla, y el constructor fue incapaz de terminar el trabajo como había
prometido. Furioso por su derrota, el constructor rebeló ser un gigante y quiso
lanzarse contra los dioses, pero Thor lo derribó.
Thor (del nórdico antiguo
Þórr; Dzor, pronunciado tradicionalmente en español como Tor) es el dios del
trueno en la mitología nórdica y germánica. Es hijo del dios mayor Odín y de la
diosa Jörð, personificación de la Tierra. Su esposa es Sif, con quien tuvo una
hija llamada Þrúðr, la cual es una valquiria cuyo nombre significa
"fuerza" o "poder". Con la giganta Járnsaxa tuvo otro hijo
llamado Magni, que significa "fuerte". También es padre de Móði, cuyo
nombre significa "ira", pero no hay información sobre quién es su
madre. Además, un hijastro llamado Ullr, hijo de Sif.
Thor tenía una gran área de
influencia desde controlar el clima y las cosechas hasta la consagración,
justicia, protección y batallas. Por ello en muchas ocasiones se lo consideraba
como una deidad suprema. El atributo más obvio del dios es su aspecto guerrero,
gran cantidad de mitos lo describen abriéndose paso con su martillo de guerra
entre hordas de gigantes. Sin embargo Thor en el papel de guerrero cumple un
rol protector, a diferencia de Odín que llamaba a sus seguidores a la batalla
para la muerte y la gloria, por ello Thor tuvo un culto más extendido entre las
comunidades más pacíficas de campesinos y artesanos.
El objeto más representativo
de Thor es su martillo de guerra de mango corto, llamado Mjolnir, creado por
los enanos Sindri y Brokk. Tiene la propiedad de nunca fallar en su blanco y
tras ser arrojado siempre regresa a las manos de su dueño, además puede
encogerse y ser llevado con disimulo en la ropa y también puede ser utilizado
para arrojar rayos. Para alzar su martillo, Thor utiliza un cinturón que
aumenta su fuerza, llamado Megingjörð, y un par de guantes especiales de
hierro. Mjolnir es su arma principal a la hora de combatir a los gigantes,
siendo calificada por los dioses como el más precioso de todos los trabajos de
los enanos y el arma más poderosa que poseen los dioses en su defensa contra
las fuerzas de Jötunheim. El dios viaja en un carro que es tirado por los
machos cabríos mágicos llamados Tanngrisnir y Tanngnjóstr. Tenían la
peculiaridad de que Thor podía cocinarlos y luego si necesitaba continuar su
viaje, cubría los huesos con la piel y utilizaba el poder regenerador de su
martillo para volverlos a la vida.
Los
æsir se mantenían siempre jóvenes comiendo las manzanas de Iðunn (la guardiana
del fruto de la eterna juventud) aunque, a pesar de ello, podían morir. De
hecho, según la profecía, casi todos morirían en el Ragnarök y solo quedarían
unos pocos para reconstruir el mundo.
De
acuerdo con Skáldskaparmál, los dioses Odín, Loki y Hœnir un día emprendieron
un viaje a través de montañas y tierras salvajes hasta que necesitaron
detenerse por comida. En un valle vieron una manada de bueyes, tomaron uno y se
dispusieron a cocinarlo en un horno en la tierra, pero pronto vieron que no se
cocinaba. Mientras intentaban determinar la razón de esto, escucharon a alguien
hablando en el roble, encima de ellos, diciendo que él era el responsable de
que la carne no se cocinara. Miraron hacia arriba y vieron a Þjazi bajo la
forma de un gran águila y les dijo que si le dejaban comer del buey, él haría
que el horno cocinase su comida. Aceptaron y bajó del árbol, comenzó a devorar
gran cantidad de comida. Comía tanto que molestó a Loki, quien tomó su largo
bastón e intentó golpearlo, pero el arma se pegó al cuerpo de Þjazi y levantó
vuelo llevando a Loki consigo. Mientras volaba sobre la tierra, Loki gritaba y
rogaba que le permitiera bajar, ya que sus piernas golpeaban contra los árboles
y las piedras, a lo cual Þjazi prometió bajarlo con la condición de que
atrajera a Iddun fuera del Asgard con sus manzanas de la juventud; lo cual Loki
prometió hacer.
Luego en el momento acordado, Loki atrajo a Iðunn fuera del Asgard, a un bosque, diciéndole que había encontrado unas manzanas que ella debería tener, y que debía llevar sus manzanas para compararlas. Entonces Þjazi apareció bajo la forma de un águila, tomó a Iðunn y voló lejos con ella hasta su reino, Þrymheim, ubicado en Jötunheim.
Los dioses privados de las manzanas de Iðunn comenzaron a envejecer. Cuando se enteraron que la última vez que fue vista Iðunn había sido en las afueras del Asgard y con Loki, lo amenazaron con torturarlo y matarlo si no iba a rescatarla. Loki tomó prestado el abrigo mágico de Freyja, el cual le permitiría tomar la forma de un halcón; luego voló hacia Jotunheim hasta que encontró la residencia de Þjazi. Encontró a Iðunn sola, mientras Þjazi se encontraba en un bote en el mar, Loki la transformó en una nuez y la llevó de regreso volando tan rápido como pudo. Cuando Þjazi regresó a su casa y descubrió que se había ido, tomó su forma de águila y voló detrás de Loki. Cuando los dioses vieron a Loki que volaba hacia ellos y Þjazi que iba justo detrás, encendieron una hoguera que quemó las alas de Þjazi y causó que cayera al piso, donde fue atacado y muerto.
La
hija de Þjazi, Skaði, se puso su equipo de guerra y fue al Asgard a buscar
venganza. Temeroso de enfrentar a la diosa del invierno, Odín le ofreció a
Skaði poner los ojos de su padre como estrellas y desposar un dios. La única
condición impuesta fue que debía elegir compañero con sólo ver los pies de los
candidatos. Ella esperaba elegir a Baldr, pero erró el tino y escogió a Njörðr,
un dios del mar. No estaban hechos el uno para el otro y, finalmente, se
separaron. Hay quien afirma que se casó con Ullr, dios de los patines de nieve
y el tiro con arco. Otros cuentan que tuvo con Odín varios hijos.
Loki es un dios embaucador, hijo
de los gigantes Farbauti y Laufey, tiene dos hermanos, Helblindi y Býleistr, de
los que poco se sabe. En las eddas es descrito como el «origen de todo fraude»
y se mezcló con los dioses libremente, llegando a ser considerado por Odín como
su hermano hasta el asesinato de Balder. Después de esto los Æsir lo capturaron
y lo ataron a tres rocas. Se liberará de sus ataduras para luchar contra los
dioses en el Ragnarök.
Balder,
hijo de Frigg, tenía pesadillas donde presagiaba su muerte y comentó sobre ello
a los demás dioses. Su madre, recorrió el mundo haciéndole jurar a todas las
cosas que jamás harían daño alguno a su hijo. De ahí que en las reuniones en el
Thing, los dioses se divertían arrojándole objetos, ya que sabían que ninguno
podía herirlo. Cuando Loki supo de esto se enfureció y fue a hablar con Frigg
bajo la forma de una mujer contándole lo que sucedía en el Thing y le preguntó
si había hecho jurar a todas las cosas para que no dañaran a Balder. Frigg
recordó que no había considerado necesario hacer jurar al muérdago, por
considerarlo inofensivo. Loki conociendo esto hizo un dardo utilizando una rama
de muérdago, luego fue al Thing y engañó al hermano ciego de Balder, llamado
Höðr, e hizo que le arrojase el dardo, matando así a Balder.
La
angustia de los dioses fue mucha, pero en especial la de su esposa que murió de
tristeza y la de su madre que fue a rogarle a la diosa Hel que lo dejara salir
del reino de los muertos. Hel le dijo que si todas las criaturas y las cosas
lloraban a Balder, ella le permetiría regresar.
Frigg,
movida por su amor de madre, se vio otra vez caminando el mundo entero,
haciendo que todo se lamentara de la muerte de Balder, pero llegó y se encontró
con la misma vieja, es decir Loki, quien dijo que Balder no había hecho nada
por ella, por lo que no se sentía obligada a llorarlo.
De
esta manera, Loki condenó a Balder a permanecer en el reino de los muertos.
9 – Muspelheim
Muspelheim,
también llamado Muspel (del nórdico antiguo Múspellsheimr y Múspell,
respectivamente), es el reino del fuego en la mitología nórdica. Es el hogar
de los Gigantes de Fuego, de los cuales Surt era el más poderoso.
Se
cree que el Muspelheim era el más elevado de todos los reinos, y se encontraba
por encima de Asgard, el hogar de los Æsir.
En
el Ragnarök, los cielos se abrirán y Surt saldrá del Muspelheim seguido de
todos sus gigantes, marchando hacia Asgard y destruyendo a su paso el puente
Bifrost.
Surt o Surtur es el líder de los gigantes de fuego
en el sur, el soberano de Muspelheim, el reino de fuego. Su nombre significa
Moreno o Negro, y en el fin del mundo, el Ragnarök, sus hordas se apresurarán
hacia el norte como un viento austral para aplastar a los dioses.
Fuente: Wikipedia